La Semana Santa, El Carnaval, y La Trashumancia, Patrimonio Cultural Inmaterial de España

La Secretaría de Estado de Cultura inició de oficio los procedimientos de declaración de Manifestación Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial
CEEM. Caracas, 9-4-2017
«La Semana Santa», «El Carnaval» y «La Trashumancia» han sido declarados como Manifestación Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de España. La determinación fue acordada el Consejo de Ministros celebrado en Madrid el 7 de abril.
Se trata de la primera ocasión en la que se aprueba una declaración de estas características en aplicación de la Ley de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial del 25 de mayo de 2015.
El ministerio de Educación Cultura y Deporte que presentó la propuesta para la declaración de las tres manifestaciones representativas de la identidad española, presentó de manera sucinta las fundamentales características de cada una de esta manifestaciones de la identidad española.
La Semana Santa
La Semana Santa, conmemoración de la Pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, comprende en España una serie de celebraciones, entre las que destacan las procesiones por todo el territorio español. Una manifestación con múltiples variables en el país. Es, por tanto, un fenómeno plural que, aun compartiendo rasgos esenciales a lo largo de la geografía española, no permite establecer modelos de fiesta.
Desde la época medieval, las celebraciones de Semana Santa han funcionado como formas de expresión de la religiosidad popular y como referentes de identidad, no solo para el mundo católico, sino también para gran parte del conjunto de la población, que han convertido a la Semana Santa en un fenómeno plural en el que participan todos los géneros y capas sociales, en muchos casos al margen de la práctica religiosa.
La Semana Santa en España, como fenómeno plural, tiene una gran proyección internacional, en especial para Latinoamérica, no solo como referente religioso, sino también como referencia social y de identidad.
El Carnaval
El Carnaval es una de las manifestaciones culturales inmateriales más emblemáticas, vividas y recreadas de España. El origen de esta fiesta se remonta a épocas ancestrales y ha experimentado numerosas hibridaciones culturales hasta la actualidad. Presenta elementos que caracterizan también a otras fiestas, principalmente del periodo invernal.
Aunque fue prohibido en varias ocasiones a lo largo de la historia, sus protagonistas han logrado mantener la continuidad de esta manifestación cultural a lo largo del tiempo en muchas localidades. El Carnaval se manifiesta, tanto en los valores relacionados con la diversión, la catarsis, el ocio e incluso la religión, como en su capacidad de expresión de identidad para muchos grupos.
Existe una enorme amplitud de formas de vivir el Carnaval, desde las expresiones rurales más primitivas a las grandes manifestaciones urbanas que se entremezclan en esta fiesta mediante símbolos de origen pagano, basados en supuestas referencias históricas y elementos religiosos. Es un conjunto de bienes dispersos territorialmente donde no existe un único modelo de celebración, es, por tanto, un fenómeno plural y diverso, pero que responde a una vivencia común que le da unidad y representatividad en España.
La Trashumancia
La Trashumancia en España constituye en la actualidad un patrimonio vivo. Además de haber contribuido a conformar la identidad cultural de muchos territorios de España, la actividad trashumante ha originado un rico patrimonio cultural y etnográfico, reflejado en fiestas y tradiciones, en la toponimia, en la gastronomía y en toda la arquitectura relacionada con esta actividad.
También, las manifestaciones de la tradición oral, la artesanía y las técnicas de pastoreo tradicional, así como la ordenación de los pastos en el marco del derecho consuetudinario son elementos de la cultura trashumante que esta actividad ayudó a transmitir a su paso por los diferentes y distantes territorios peninsulares.
De esta manera, la Trashumancia ha sido tradicionalmente un mecanismo de intercambios culturales entre los diferentes territorios de la Península. A través de la amplia red de vías pecuarias, se produjo la transmisión de noticias y conocimientos, lo que a lo largo de los diferentes territorios genera una cierta homogeneidad cultural derivada de las interrelaciones sociales y culturales que este pastoreo producía.
La actividad ganadera trashumante ha aunado históricamente el aprovechamiento de los recursos naturales y el ganado mediante la denominada «cultura pastoril trashumante», produciendo interrelaciones familiares, sociales, económicas, patrimoniales y biológicas, además de modelar y contribuir a la cohesión y vertebración del paisaje peninsular.
Manifestación Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial
La Secretaría de Estado de Cultura del Gobierno de España inició de oficio los procedimientos de declaración de Manifestación Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial por medio de un Real Decreto, asegura el Ministerio de Educación Cultura y Deporte. Tras cumplir con todo los trámites, el viernes, 7 de abril se procedió a la Declaración de estas tres manifestaciones que para su específica comprensión requieren de una consideración unitaria, con independencia de la propia que pueda recibir en una o varias Comunidades Autónomas y atendiendo también a la trascendencia internacional de todas ellas.
El Ministerio de Educación, también expresa que, con estas declaraciones, se manifiesta el compromiso por parte del de salvaguardar, proteger y difundir el patrimonio cultural inmaterial, y se cumple con los principios de la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial aprobada por la UNESCO en 2003 y ratificada por España en 2005